Miguel Ángel Landa afirma que el humor se acabó en Venezuela

Fuente: Yelimar Requena



Miguel Ángel Landa reveló en el espacio En Intimo de Globovisión que pese a su distintivo buen humor le es imposible hallar sonrisas en la realidad actual del Venezuela donde a su juicio impera la necesidad, la escasez y miles de vicisitudes a causa de una dirección inadecuada.

"El humor se acabó en Venezuela, la gente está angustiada, preocupada y solo piensa en el momento en que la crisis acabe".
El actor insistió en que urge un cambio de dirección, sobre todo porque cree fielmente en la recuperación de la economía y la sociedad. Pese a no manejar, según él, el léxico ni el discurso no descartaría trabajar como político para ayudar a la recuperación del país.

La política se metió conmigo
Landa aseguró que nunca fue político pero que la política se metió con él, refiriéndose a hace 30 años cuando su programa humorístico El y Ella, transmitido por RCTV, fue sacado del aire por hechos vinculados a dicho tema.

Aquel espacio lo compartía con su entonces esposa, la cantante Mirla Castellanos.  Y ese hecho llevó al actor a ser un profundo crítico de la realidad política de Venezuela y lo alejó de un gran amigo como lo es Roman Chalbaud, quién le dio la oportunidad de hacer cine y lo llevo de camionero a actor en Cuentos para mayores (1963).



Me quitaron Bienvenido sin derecho a adiós
El afamado comediante contó que fue un gran golpe para su carrera que suspendieran su programa de humor Bienvenido, transmitido durante 20 años ininterrumpidos por Venevisión, pero que más fuerte fue que no lo dejaran despedirse siquiera de su público.

"Pedí un programa de despedida y me dijeron que sí, invite a todo el mundo y cuando el estudio estaba lleno y estábamos listo los técnicos me dijeron que estaba suspendido. Hubo un silencio sepulcral".
Confesó que el programa salió del aire siendo el de mayor rating del canal, todo porque no le caía bien a un importante trabajador de la empresa, cuyo nombre no reveló por respeto.

El dolor más grande
El actor reveló que la muerte de su madre, a causa de un cáncer, cuando apenas tenia 11 años es lo mas duro que le ha tocado vivir.

El comediante aseguró que desde pequeño fue muy enfermizo y no podía dormir solo por lo que compartía la cama con su madre hasta los ocho años cuando aquella enfermedad comenzó a llevársela.


Reveló que su popular gritó de guerra "haz bien y no mires a quién" se la enseñó su madre cuando era muy pequeño y que aun hoy día la lleva consigo.

"Faltó mucho por vivir pero no hay un día que salga de mi casa y no diga bendición mamá".
El boxeo para saltar al espectáculo
El actor comentó que la actuación le interesó desde pequeño y que al ver una película sobre la disciplina pensó en probar suerte el cuadrilátero para después de unas cuantas victorias grabar su propia película. Pero en cambió se ganó un derechazo de un campeón mundial.


En La Pastora, la parroquia que lo vio crecer, andaba el campeón de 1965 en peso welter Carlos "El Morocho" Hernández, quien coincidió con el actor en una actividad del grupo YMCA y le dejó claro que el boxeo no era lo suyo.

"Me toca el Morocho Hernández que tenía una mano que te toca y te pone como manteca".
El rumbo de su vida viajó en barco hacia a Roma, donde inició su formación del actor inició en Roma en la hoy conocida "Accademia Nazionale d'arte Drammatica Silvio D'Amico".

No tuve suerte con el matrimonio
Respecto a su primer matrimonio con la primerísima de Venezuela, Mirla Castellanos,  con quién se mantuvo 12 años, dijo fue una experiencia hermosa, llena de anécdotas maravillosas que dejó como resultado dos hermosos hijos: Mirla Dayana González Castellanos (1971) y Miguelangel González Castellanos (1972).
Luego de tres intentos, el actor de 80 años, concluyó que como dice el dicho:

"Yo no me gane la lotería con el matrimonio, el matrimonio es una lotería y yo no tuve suerte con eso".